La NASA ha anunciado que la compañía Space Exploration Technologies (SpaceX) será la responsable de poner en orbita lunar dos partes esenciales del orbitador lunar Gateway, y lo hará por $332 millones de dólares.

Las piezas que se lanzarán forman parte de lo que funcionarán como parada en boxes para futuras misiones lunares. Uno es elemento de energía y propulsión, y el puesto avanzado de vivienda y logística, juntos conformarán la primera estación espacial en órbita de la Luna. El anuncio dejó agendado el evento para el 2024.

El Falcon Heavy, que proporciona una capacidad de carga muy superior al comúnmente usado Falcon 9 de SpaceX ha tenido su viaje de prueba a principios de 2018 con un exitoso resultado. Recordará la misión que puso en orbita Solar a Starman y un Tesla Roadster, un maniquí vestido de astronauta al volante del Tesla rojo de Elon Musk que hora vagan por el espacio. Luego de esto solo ha tenido dos lanzamientos comerciales, Arabsat-6A, lanzado en abril de 2019 y STP-2 unos meses después. Después de esto el Heavy no ha tenido trabajo, aunque se prevén misiones para el próximo año.

Imagen CG de la puerta de enlace lunar con el elemento de propulsión y el primer elemento habitable adjunto. No es particularmente espacioso, pero la vista es inmejorable. Imagen: NASA

Ahora que la NASA le ha confiado esta misión de máxima importancia llevando estas piezas fundamentales a la órbita lunar, PPE y HALO, todo tiene mucho sentido para la compañía de California. La realidad es que, como sigan los tropiezos en los trabajos sobre el Sistema de Lanzamiento Espacial de la agencia estadounidense, seguramente SpaceX podrá firmar más contratos en el futuro próximo.

El PPE es, ni más ni menos, una nave espacial de propulsión a energía solar de 60 kilovatios que también proporcionará energía, comunicaciones de alta velocidad, control de actitud y la capacidad de mover el Gateway a diferentes órbitas lunares, proporcionando acceso a la superficie de la Luna como nunca antes se tuvo.

El HALO es el alojamiento presurizado donde trabajarán los astronautas que visitan la estación espacial en su viaje a la Luna. Desde aquí se puede controlar buena parte de las misiones y servirá como punto de acoplamiento para las naves que la visitarán. HALO funcionara de manera similar a la ISS, sosteniendo investigaciones científicas. Además distribuirá la energía, proporcionará comunicaciones para los vehículos visitantes y las expediciones a la superficie lunar, y complementará los sistemas de soporte vital a bordo de la capsula Orion, la nave espacial de la NASA que transportará a los astronautas de Artemis al Gateway.

El tamaño de la Gateway será aproximadamente una sexta parte del tamaño de la Estación Espacial Internacional, y se espera que funcione como una estación de paso, ubicada a 70.000 mil kilómetros en su distancia más lejana de la superficie lunar, en una órbita de halo casi rectilínea. Servirá como punto de encuentro para los astronautas de Artemisa que viajen a la órbita lunar a bordo de la Orion, antes de transitar a la órbita lunar baja y la superficie de la Luna. Desde esta posición ventajosa, la NASA y sus socios comerciales llevarán a cabo investigaciones científicas y tecnológicas sin precedentes en el espacio profundo.

Impresión artística de la nave espacial Orion en el Gateway con el elemento de ascenso European Large Logistics Lander acoplado. Imagen: ESA

El PPE y HALO, además de ser fundamentales para que la Gateway empiece a «respirar», son grandes y no se pueden enviar por partes. Pero hay muy pocos vehículos pesados ​​de lanzamiento disponibles, y parece que decidieron que el de SpaceX era la mejor opción, ya que ya han volado tres misiones con éxito.

Esta misión está valorada en $ 332 millones entre lanzamiento y costos relacionados, por lo que se trata de una inversión seria que requerirá mucha colaboración entre SpaceX, NASA, Northrop Grumman (que está construyendo el HALO) y Maxar (haciendo la PPE desde mayo de 2019). Esta cifra es casi tres veces superior a la que la NASA otorgó a SpaceX en febrero del 2020 para el lanzamiento del Falcon Heavy enviando su misión de asteroides Psyche, con un costo total de 117 millones de dólares. Sin embargo, si bien la misión Psyche probablemente utilizará un lanzador Falcon Heavy estándar, el lanzamiento de la Gateway podría incluir nuevo carenado de carga útil extendido, que SpaceX está desarrollando para misiones de seguridad nacional, junto a otros procesos especiales relacionados con el lanzamiento.

El lanzamiento está programado para no antes de mayo de 2024 desde el Complejo de Lanzamiento 39A en el Centro Espacial Kennedy de la NASA en Florida. Pero esa fecha puede (y de hecho es muy probable que lo haga) en tanto se acumulen los retrasos. Todo el programa Artemis se ha venido adaptando a una realidad distinta a lo programado, en cuanto a los tiempos. Es que incluso un plan de cinco o seis años para regresar a la superficie de la luna sigue siendo bastante ambicioso.